smart city
Por Lucía Bellocchio,
Trend Smart Cities (*)
Actualmente ya no hay dudas de que un ‘enfoque smart city’ es una respuesta a las demandas de la ciudadanía del siglo XXI. Lo que las define es la implementación de soluciones urbanas sostenibles, enfocadas en mejorar la calidad de vida de las personas en armonía con la naturaleza, y potenciadas por el uso de datos para la toma de decisiones.
Para que dicho enfoque penetre en los diferentes ejes de trabajo e impacto de la ciudad, es imprescindible contar con una planificación a mediano y largo plazo; una estrategia y visión de ciudad que dé lugar a la innovación urbana y el uso de datos para la toma de decisiones con el objetivo de mejorar los servicios ciudadanos.
Y aquí juega un rol fundamental una de las dimensiones más importantes, y tal vez menos difundidas, de las ciudades inteligentes. Estas no son únicamente un modelo urbano que implica inversión, sino también la posibilidad de que la ciudad -e inclusive su región- se proyecte en el mundo, se torne atractiva para nuevas inversiones, atraiga o retenga talentos y sea considerada en financiamientos o inversiones internacionales.
Todo esto se traduce en mayor riqueza para su población y en la posibilidad de convertirse en un polo productivo con impacto transversal en diversas industrias. De esta forma, ¿quién no querría vivir, invertir o trabajar en una Smart City? ¿Cómo no considerar foco de inversiones a una ciudad que tiene un plan o estrategia consistente en tal sentido?
La oportunidad de las ciudades
Según datos de la ONU, en 2050 el 70% de la población mundial vivirá en ciudades. La región de América Latina y el Caribe concentra el 80% de sus habitantes en zonas urbanas, lo que la ubica en el segundo puesto en el mundo. Se necesitan todos los esfuerzos disponibles para que estos espacios sean respetuosos del ambiente, integren a la población con necesidades diversas y generen oportunidades para que todas las personas que las habitan o transitan accedan a una vida de calidad y saludable.
Las ciudades inteligentes requieren de una mirada multisectorial y multidisciplinaria para generar respuestas a los desafíos cambiantes que afrontan.
Un factor a su favor es que tienen la oportunidad de brindar condiciones de empleo a las profesiones que permitirán el desarrollo de áreas productivas estratégicas, como lo son aquellas vinculadas a las nuevas tecnologías, movilidad, gobernanza, sostenibilidad, planificación urbana, innovación y emprendedurismo. Contar con estos perfiles ubica a las ciudades en una posición de ventaja para responder de manera dinámica a las necesidades derivadas del gran número de población que concentran y que la tendencia muestra que será creciente.
Gestión urbana con enfoque smart city: el camino que muchas ciudades están siguiendo
Ciudades de vanguardia como New York, Londres, París, Singapur o Dubái son reconocidas mundialmente por sus políticas para incorporar la tecnología en el diseño urbano, pero existen también ejemplos más cercanos. Sólo por mencionar algunos de ellos:
– Curitiba, una ciudad con planificación sostenida que atrae inversiones
Curitiba, en Brasil, trabaja desde hace años en una planificación con impronta smart. Busca, a través de políticas a largo plazo, generar innovación y desarrollo para mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Esto la transforma en una gran oportunidad para empresas locales, regionales e internacionales que encuentran en esta locación brasilera una aliada para generar inversiones sostenibles.
Desde hace más de seis años, la ciudad es anfitriona de la Smart City Expo Curitiba, un evento que reúne a más de 50 países del mundo y oradores internacionales especializados en tendencias urbanas, lo que la reafirma como referente de las soluciones inteligentes para países de América Latina. Además, cuenta con empresas de alcance nacional que desarrollan tecnología para que las ciudades puedan implementar estrategias que mejoren la gestión pública de los espacios.
Su enfoque sostenible y humano la convierte en foco de atracción tanto para capitales que buscan desarrollar negocios innovadores como para profesionales de diversas áreas que se vuelven protagonistas en estos centros urbanos. Esta visión de oportunidad y futuro está profundamente ligada a la toma de decisiones de quienes están en roles de gobierno y pueden innovar en la gestión de los centros urbanos.
– Santiago de Chile, una estrategia y visión de ciudad inteligente
“Sé Santiago” se denomina a la estrategia de smart city de Santiago de Chile. Su objetivo es posicionar a Santiago como ciudad inteligente en el contexto nacional e internacional, activando y articulando la generación de soluciones en torno a la movilidad, seguridad y medio ambiente para el Gran Santiago, utilizando las tecnologías digitales en un marco de Ciudad Inteligente. La misma ya se encuentra en su última fase: posicionamiento (2017-2019), consolidación (2020-2022) e institucionalización (2023-2025).
De esta forma, “Sé Santiago” ha buscado ser un facilitador de espacios para que los distintos actores puedan tener un punto de encuentro, en el que converjan objetivos de entes públicos y privados y, de esa forma, resolver situaciones que requieren coordinación y organización de múltiples actores y sectores. Dentro de sus proyectos más emblemáticos están: ‘Proyecto Smart Data Ciudad’, ‘Movilidad para la ciudad’ y ‘Gestión Hídrica para APR’.
Del ‘City Branding’ al ‘Smart City Branding’
Ante el dinamismo propio de las ciudades y un mayor protagonismo de ellas en el escenario global, mayores exigencias de la ciudadanía, servicios cada vez más conectados y digitales, una creciente urbanización y los impactos de la tecnología, todo parece indicar que inclusive en términos de ‘city branding‘ ya no alcalza con diseñar un lindo logo de la ciudad y promover el turismo.
Ampliar la participación de la población, hacerla parte de las políticas de transformación de las ciudades en espacios donde mejorar la calidad de vida de las personas sea la prioridad y construir colaborativamente las políticas a implementar es tan fundamental como el uso de la tecnología y la implementación de una planificación integral. Como suelen reivindicar los informes más actuales sobre el tema: las ciudades inteligentes requieren una ciudadanía inteligente.
Es así que hablar hoy de migrar hacia una gestión inteligente y sostenible de las ciudades parece ser una sólida estrategia para su proyección internacional. Así, podrán tornarse más competitivas, atraer talento e inversiones, pero además, financiamiento internacional, tema no mejor en momentos como los actuales.
(*) Trend Smart Cities acompaña a gobiernos, empresas, startups y emprendedores a generar un impacto positivo para un mejor futuro urbano. Conocé más en www.trend-smartcities.com. Instagram @trendsmartcities.
En este enlace podés leer más columnas de Lucía Bellocchio relacionadas al mundo de las smart cities publicadas en +COMUNIDAD.
Imagen principal: Santiago de Chile. Fuente: SmartCitiesWorld.