Como si fuera el fin del mundo. La descripción apocalíptica se repite entre los testimonios de las miles de personas afectadas por los incendios forestales en Europa. En julio de 2022, la combinación entre una ola de calor con temperaturas récord y la sequía estival encendió múltiples focos en el sur continental. Más de 200.000 hectáreas, muchas ocupadas por bosques, fueron arrasadas en España, Portugal, Francia y Grecia.
En pocos días, el calor extremo y el fuego causaron más de 1.000 muertes. “El calentamiento global está provocando un cambio sin precedentes en el régimen de incendios de Europa, sobre todo en el área del Mediterráneo”, advirtió un estudio internacional liderado por Jofre Carnicer, investigador de la Universidad de Barcelona.
Según un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de febrero de 2022, el cambio climático causado por el ser humano y la sequía provocarán que el número de incendios forestales extremos aumente un 30% en los próximos 28 años. Desde el Programa de Observación de la Tierra de la Unión Europea, Copernicus, alertó también que la temporada de incendios en Europa comenzó en 2022 antes de lo habitual y con más intensidad que en 2021.
“Esta tiene que ser la década de la acción climática decisiva. Eso significa confianza, multilateralismo y colaboración. Tenemos una opción. Acción colectiva o suicidio colectivo”, sentenció António Guterres, secretario general de la ONU.
Experiencias pasadas y aprendizajes
A inicios de 2022, las temperaturas elevadas y la falta de lluvias provocaron cientos de incendios en el norte argentino. Con más de 800.000 hectáreas consumidas, la provincia de Corrientes fue la más afectada (ardió el 10% de su territorio).
“En la Municipalidad de Corrientes llevamos adelante una mesa de trabajo entre la Secretaría de Ambiente y la de Infraestructura para prevenir y no sufrir el impacto de los incendios. Se trabajó mucho en los diferentes espacios verdes limpiando para reducir lo mayor cantidad posible de material verde incendiable”, contó a +Comunidad Ignacio Maldonado Yonna, secretario de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la ciudad.
Si bien la capital correntina no se vio tan afectada como otras localidades rurales, las tareas de prevención abarcaron a toda la provincia. En ese sentido, la creación local de mapas de riesgo, operativos de acción rápida y esquemas de colaboración aceitados entre los sectores público y privado hicieron que “la ciudad sea mucho más resiliente ante este tipo de catástrofes”, indicó el funcionario.
Con respecto a los incendios en el hemisferio norte, Maldonado Yonna observó que son situaciones “cada vez más cotidianas” y que los planes de acción climática “empiezan a tener más preponderancia en la agenda local”. “La situación es la misma, no es de Europa ni de Latinoamérica, son las consecuencias del cambio climático. Las hablamos, las debatimos y las conocemos, pero hasta que no se hacen presentes en cada uno de nuestros territorios creemos que no nos va afectar”, reflexionó.
Gestión local del riesgo e incendios
Ya sean rurales o urbanos, los incendios afectan a las poblaciones en todos los continentes. Las políticas locales para mitigar sus efectos son relativamente recientes y están relacionadas con la capacidad de las ciudades para manejar los desastres.
La localidad de A Arnoia (Galicia, España) avanza en 2022 con la creación de “polígonos agroforestales” con el fin de restaurar tierras agrícolas abandonadas y prevenir incendios forestales. Además de evitar los siniestros, el pueblo procura reintroducir la viticultura y volver a ser productivo.
En Argentina, la ciudad patagónica de San Martín de Los Andes conformó la Red de Prevención de Incendios de Interfase. Integrada por el gobierno local, organizaciones ambientales e instituciones académicas, busca difundir las medidas de prevención para fortalecer la gestión de riesgos respecto al posible descontrol de focos ígneos.
En esta nota podés conocer las diferencias entre los incendios urbanos, de interfase, forestales y rurales, y también un poco sobre su historia moderna. Además contiene los casos de más de cinco ciudades que implementaron estrategias para mitigar sus efectos (las soluciones van desde la implementación de sistemas geográficos hasta el uso de sistemas de alerta comunitaria).
¿Qué soluciones lleva adelante tu ciudad para mitigar los efectos de los incendios forestales y periurbanos? Podés compartir la experiencia en +Comunidad.
Imagen principal: Incendios en las colinas de Mijas, al sur de España. Fuente: EPA.
Redacción +Comunidad.