INNOVACIÓN Y EFICIENCIA
“Valladolid, Escenario Demostrador”: un sandbox pionero en España

En diálogo con +COMUNIDAD, Modesto Mezquita, coordinador de Innovación de la Agencia de Innovación y Desarrollo Económico de Valladolid, nos cuenta cómo implementaron el sandbox en su ciudad. “Un sandbox facilita un marco legal compatible con la experimentación de nuevos productos y modelos de negocio en un entorno real”, explica.

El Ayuntamiento de Valladolid desarrolló un sandbox pionero en España, según el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. A través de la Agencia de Innovación y Desarrollo Económico de la ciudad se ofrece un espacio urbano, servicios y bienes municipales a startups, empresas e investigadores para experimentar en un escenario real.

El sandbox de Valladolid fue vinculado directamente al plan de acción del Acuerdo climático para probar tecnologías para la descarbonización de la ciudad. Esta solución se convirtió en una política de estado ya que fue aprobada mediante una Ordenanza que fundamenta su creación, objetivos y detalla su implementación.

Modesto Mezquita, coordinador de Innovación de la Agencia a cargo de la implementación del sandbox, contó a +COMUNIDAD más detalles acerca de este instrumento en la ciudad castellano-leonesa.

━⁠ ¿Cómo surgió la idea de desarrollar un sandbox desde el sector público local? ¿Qué desafío buscaban resolver?

La Ordenanza “Valladolid Escenario Demostrador”, cuyo objeto es regular el uso de los bienes y servicios municipales como escenario demostrador para proyectos de innovación empresarial de cualquier tipo, surge de la experiencia adquirida por la ciudad de Valladolid en proyectos de innovación, desarrollados en colaboración público-privada.

En esos proyectos, un factor determinante ha sido el efecto demostrador que el espacio urbano, sus infraestructuras y servicios municipales puestos a disposición de cada proyecto. Ha permitido impulsar prototipos, plataformas tecnológicas, productos y sistemas de organización y producción industriales. A su vez, esto puso de manifiesto la necesidad de dotar de un marco normativo a la relación simbiótica entre universidad, centros tecnológicos, empresa y administración local.

Su objetivo es impulsar el desarrollo de la economía local y la incorporación de las tecnologías habilitadoras en todos los sectores productivos. También crear en la ciudad de Valladolid un nuevo modelo económico sostenible e inteligente impulsado por la transformación digital.

Los autobuses de Valladolid comenzaron a utilizar sistemas de datos para lograr una movilidad más eficiente. Imagen: Ayuntamiento de Valladolid.

Al momento de la implementación, ¿se enfrentaron a algún tipo de barrera burocrática o cultural?

━ Era necesario regular, con criterios de seguridad, igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres y de trato y transparencia, el uso común especial y privativo del dominio público municipal, extendiendo las formas tradicionales de utilización de los bienes demaniales a los patrimoniales del Ayuntamiento y a los servicios públicos municipales.

Esta utilización temporal ha de tener como claro objetivo: servir de escenario real para la prueba de proyectos piloto innovadores de empresas, investigadores particulares o instituciones, que persigan mejorar la gestión y rentabilización de ese patrimonio y/o la calidad y eficiencia de los servicios públicos municipales y la mayor satisfacción de sus personas usuarias.

Por ello se optó por aprobar una Ordenanza municipal, aprobada por el Pleno del Ayuntamiento, que regulara unas condiciones generales de acceso mediante autorización o licencia a la utilización de los bienes y servicios municipales. Estableciendo como regla general la terminación convencional del procedimiento de autorización a través de convenios específicos adecuados a las características de cada proyecto y a la naturaleza y situación específica del bien o servicio sobre el que se va a actuar.

¿Qué rol juega el sector privado y la academia en el sandbox de Valladolid?

━ La innovación aplicada al servicio del desarrollo económico local se facilita desde el Ayuntamiento de Valladolid a través de la cesión y creación de espacios demostradores. De laboratorios urbanos o labs disponibles para las universidades, centros tecnológicos, empresas y el sector privado. Asimismo, facilitando la creación de “bancos de pruebas regulatorios” o espacios públicos de testeo (denominados en inglés sandbox). Espacios controlados y seguros de pruebas que permiten experimentar con ideas, productos, servicios o herramientas en un ambiente protegido, libre de posibles riesgos.

Un sandbox facilita un marco legal compatible con la experimentación de nuevos productos y modelos de negocio en un entorno real, durante un periodo de tiempo limitado y bajo estricta supervisión del regulador. Los sectores en los que se puede aplicar son la movilidad, la energía y la transición energética, la logística y el reparto de mercancías, entre otros.

¿Podrías contarnos sobre proyectos que estén utilizando el Sandbox de Valladolid y haya generado un impacto positivo?

━ Se trabaja sobre temáticas tales como la transformación de biogás de residuos en biometano como fuente energética de industria y sistemas de transporte, en el uso de la red de alumbrado público como red de transporte de datos de alta capacidad, en vehículo eléctrico conectado y su interacción con la infraestructura de recarga eléctrica y otras infraestructuras municipales de movilidad (red semafórica, paneles informativos, aparcamientos de uso público, etc).

Mediante sandbox, Valladolid busca una mayor eficiencia en sus sistemas de movilidad. Imagen: Ayuntamiento de Valladolid.

¿En qué beneficia a una ciudad contar con un sandbox?

━ Es un instrumento muy útil a la hora de facilitar al tejido industrial local, a las universidades, a los centros tecnológicos un instrumento de referencia que valide sus productos y desarrollos tecnológicos, especialmente si se encuentran en estado de prototipado o lanzamiento al mercado. Asimismo, permite atraer talento y aquellas empresas emergentes que necesitan testear o probar sobre un escenario real de pruebas sus nuevos productos y servicios.

Por facilitar ese escenario real, la ciudad se aprovecha del conocimiento y la innovación, ya que esos nuevos productos o servicios innovadores deben contribuir a mejorar la calidad de vida de los habitantes en general o de las personas usuarias de los bienes y servicios públicos; y/o para o mejorar la calidad eficiencia, funcionalidad y sostenibilidad de los existentes.

En definitiva, contribuye a mejorar el ecosistema local de innovación.

¿Qué consejos le darías a un equipo de gobierno local de una ciudad que quiere implementar un sandbox?

Existen múltiples mecanismos que el sector público puede adoptar para alcanzar procesos normativos y de gestión más dinámicos. Mecanismos que faciliten la comunicación entre agentes públicos y privados. Pruebas piloto, demostración y otros instrumentos que facilitan datos en tiempo real son conceptos que pueden integrarse en los procesos normativos y de gestión en todos los ámbitos y niveles de la administración local.

Una fórmula de hacerlo, y esta ha sido la utilizada por el Ayuntamiento de Valladolid, es reglamentar la utilización de los espacios y servicios públicos. De manera que se garantice la necesaria coordinación de su destino público preferente con su utilización como escenario demostrador de iniciativas privadas innovadoras. También la seguridad de los habitantes y de las infraestructuras públicas, la igualdad de acceso a esta posibilidad para todo el tejido empresarial. Así como la participación del municipio en los retornos que su colaboración genere a la empresa con el desarrollo comercial del producto o servicio que se ha contribuido a desarrollar.

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Imagen principal: Agencia de Innovación y Desarrollo Económico del Ayuntamiento de Valladolid.